Hoy Valencia vuelve a traer el mapa con geolocalización de las Fallas de València 2025

Hoy Valencia vuelve a traer el mapa con geolocalización de las Fallas de València 2025

Valencia se encuentra en uno de los momentos más esperados y emocionantes de su calendario anual: la celebración de las Fallas. Esta fiesta, declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, convierte la ciudad en un museo al aire libre repleto de ingenio, sátira, tradición y arte efímero. Y ahora que llega la plantà, el ambiente alcanza su máximo esplendor. Es el momento perfecto para sumergirse en esta experiencia única, y con la ayuda de la agenda de Hoy Valencia, donde se pueden consultar todas las Fallas de este año con geolocalización y otras propuestas imprescindibles, es más fácil que nunca planear la jornada perfecta. Solo tienes que abrir la app gratuita de Hoy Valencia (sin publicidad ni registro) y verás todas las fallas organizadas por cercanía.

La plantà: el inicio de una semana de arte en la calle

El 15 de marzo marca el inicio oficial de la plantà, el proceso mediante el cual se completan y colocan los monumentos falleros en sus respectivas demarcaciones. Desde primera hora de la mañana, los equipos de artistas falleros trabajan sin descanso para ultimar cada detalle de estas impresionantes obras de arte, que estarán listas para la visita de miles de personas. La ciudad amanece repleta de esculturas que oscilan entre lo monumental y lo minucioso, desde los colosales ninots de las Fallas mayores hasta las delicadas y tiernas escenas de las infantiles.

La plantà es mucho más que el acto físico de levantar un monumento. Supone el punto de partida de una semana frenética en la que la calle se convierte en escenario de luz, color, ruido y fuego. Además, marca el momento en el que el jurado de la Junta Central Fallera empieza su recorrido para valorar y premiar los mejores monumentos de cada sección. Estos galardones no solo otorgan reconocimiento, sino que colocan a determinadas comisiones en el centro de todas las miradas.

El arte efímero de los monumentos falleros

Los monumentos falleros son el alma de la fiesta. Cada uno de ellos se diseña a lo largo de un año entero y, en apenas unos días, se disfrutan antes de ser consumidos por las llamas. Este carácter efímero es parte de su esencia y lo que hace tan especial su contemplación. Las Fallas combinan tradición, crítica social, sátira política y un dominio espectacular de las técnicas escultóricas.

En esta edición 2025, nombres consagrados del arte fallero como Pere Baenas, Manolo García o Latorre y Sanz presentan monumentos que desafían los límites del equilibrio y la expresividad. Sus creaciones destacan por la calidad en el modelado, el uso de colores vibrantes y una cuidada narrativa que va desde el humor ácido hasta la crítica más sutil. Cada falla es un relato en sí mismo, donde los ninots representan escenas llenas de simbolismo y sarcasmo, que invitan a reflexionar sobre la actualidad y la condición humana.

Este año, la Sección Especial vuelve a acaparar la atención por la magnitud de sus proyectos. Comisiones como Convento Jerusalén-Matemático Marzal, Cuba-Literato Azorín o L’Antiga de Campanar han apostado por propuestas impactantes tanto en altura como en concepto. Estas fallas son auténticas obras maestras que requieren tiempo para ser admiradas en detalle, y perderse por sus escenas es una experiencia que nunca defrauda.

La agenda imprescindible de las Fallas 2025

Más allá de las fallas plantadas, hay un sinfín de actividades que completan el programa y que convierten la ciudad en una fiesta ininterrumpida. La Mascletà es uno de los rituales diarios más esperados. Cada día a las 14:00 horas, la plaza del Ayuntamiento se llena de espectadores que buscan sentir el estruendo y la vibración del disparo pirotécnico. Las mejores empresas del sector compiten por ofrecer el espectáculo más potente y armónico. En esta edición, destacan los disparos de Pirotecnia Valenciana, Hermanos Caballer y Turís, que elevan el listón con coreografías de pólvora que combinan ritmo, potencia y originalidad.

Por la noche, las calles de Ruzafa, el Carmen y otros barrios emblemáticos se iluminan con las luces de las calles engalanadas, auténticas instalaciones artísticas que merecen una visita pausada. Algunas de estas iluminaciones incluyen espectáculos de encendido sincronizados con música, que atraen cada año a miles de visitantes.

El día 17 y 18 de marzo tienen lugar los actos más emotivos: la Ofrenda de Flores a la Virgen de los Desamparados. Miles de falleros y falleras, ataviados con sus trajes tradicionales, desfilan hasta la plaza de la Virgen para depositar sus ramos y confeccionar un manto floral para la patrona. Es uno de los momentos más simbólicos de la fiesta, donde la devoción y la emoción se apoderan de los participantes y del público.

La Nit del Foc, la noche del 18 de marzo, es el gran espectáculo pirotécnico que ilumina el cielo de Valencia y sirve de preludio a la jornada de la cremà, en la que el fuego pone el broche final a las Fallas. La cremà de la falla del Ayuntamiento es el último acto oficial y el momento más esperado para muchos, cuando el arte se transforma en ceniza y la ciudad se prepara para empezar de nuevo.

Las Fallas: una tradición que sigue evolucionando

La fiesta de las Fallas no deja de reinventarse sin perder su esencia. A pesar de su raíz profundamente tradicional, el arte fallero incorpora cada año innovaciones en diseño, materiales y técnicas de construcción. Se apuesta cada vez más por el uso de materiales sostenibles, como el cartón reciclado y los revestimientos ecológicos, para minimizar el impacto ambiental tras la cremà.

Además, hay una tendencia creciente hacia temáticas más universales y humanistas, que trascienden la sátira local para abordar cuestiones globales como el cambio climático, la igualdad de género o la crítica al consumismo. Este enfoque amplía el mensaje y convierte las Fallas en una manifestación cultural que conecta con públicos muy diversos.

El legado y la importancia cultural de las Fallas

La historia de las Fallas se remonta al siglo XVIII, cuando los carpinteros quemaban sus trastos viejos para celebrar el final del invierno y la llegada de la primavera. Con el tiempo, estos fuegos purificadores se fueron transformando en las grandes estructuras que conocemos hoy. El papel de los artistas falleros ha sido crucial para esta evolución. Estos artesanos han elevado la técnica constructiva y escultórica a niveles de auténtica excelencia, y su labor se ha consolidado como una manifestación artística reconocida a nivel mundial.

El reconocimiento por parte de la UNESCO en 2016 no solo ha reforzado el valor patrimonial de las Fallas, sino que también ha contribuido a consolidar su proyección internacional. Hoy, las Fallas de Valencia son un referente del arte efímero y una de las expresiones más potentes de la cultura popular valenciana.