Valencia acoge una de las exposiciones más destacadas del año: Atchugarry. Hacia el futuro, en la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Esta muestra presenta siete esculturas monumentales del renombrado escultor uruguayo Pablo Atchugarry. La exhibición, que se extiende desde el Museu de les Ciències hasta el Palau de les Arts y el Hemisfèric, estará abierta al público hasta el 13 de octubre de 2024 y es de acceso gratuito.
Un recorrido escultórico al aire libre
La exposición al aire libre permite a los visitantes disfrutar de las imponentes esculturas en bronce, mármol y acero, estableciendo un diálogo único entre las obras de arte y la arquitectura futurista de Santiago Calatrava. Las piezas, como Estrella de luz, La flor y Viaje hacia los sueños, invitan a reflexionar sobre la relación entre el arte y su entorno, ofreciendo una experiencia visual y emocional sin precedentes.
Pablo Atchugarry, nacido en Montevideo en 1954, es conocido por su capacidad para transformar materiales como el mármol de Carrara y el acero inoxidable en esculturas que evocan tanto la antigüedad clásica como la modernidad. En esta muestra, Atchugarry explora temas como la eternidad de la escultura y la necesidad de reconciliarnos con la naturaleza. Cada obra refleja su meticulosa atención al detalle y su compromiso con la artesanía, trabajando los materiales a mano para capturar la esencia de cada pieza.
La obra de Atchugarry es un testimonio de su habilidad para conectar diferentes períodos históricos. Utilizando técnicas tradicionales y contemporáneas, el artista crea un puente atemporal que abarca desde la Roma clásica hasta la moderna Ciudad de las Artes y las Ciencias. Sus esculturas verticales no solo buscan la luz y la libertad, sino que también representan la búsqueda humana de sueños y aspiraciones.
Esta exposición no solo resalta la maestría técnica de Atchugarry, sino que también subraya su mensaje ecológico y humanista. En un momento en que la deforestación y la destrucción del medio ambiente son preocupaciones globales, Atchugarry aboga por un retorno a la armonía con la naturaleza. Su obra no solo es un deleite para la vista, sino también un llamado a la reflexión sobre nuestro papel en la preservación del planeta.