La exposición Vidas minadas, 25 años de Gervasio Sánchez, que se presenta en L’ETNO, el Museu Valencià d’Etnologia, hasta el 16 de febrero de 2025, ofrece una profunda reflexión sobre las devastadoras consecuencias de las minas antipersona en diversas regiones del mundo. Este proyecto, iniciado en 1995, documenta la vida de las víctimas a lo largo de un cuarto de siglo, mostrando su lucha por la supervivencia y la dignidad.
Un recorrido por historias de resiliencia
La muestra reúne 85 fotografías que narran las experiencias de siete personas provenientes de países como Angola, Mozambique, Camboya, Afganistán, Irak, El Salvador, Nicaragua y Bosnia-Herzegovina. Estas imágenes capturan momentos desde hospitales, donde las víctimas enfrentan amputaciones, hasta centros ortopédicos, donde aprenden a caminar nuevamente con prótesis. Algunas de estas personas han logrado reconstruir sus vidas, mientras que otras continúan enfrentando enormes desafíos.
La denuncia de una tragedia persistente
El trabajo de Gervasio Sánchez no solo documenta el sufrimiento individual, sino que también denuncia la injusticia de las minas antipersona y la impunidad de la industria armamentística responsable de su producción y distribución. A pesar de las leyes internacionales que prohíben su uso, estas armas siguen causando estragos en numerosas comunidades.
La trayectoria de Gervasio Sánchez
Gervasio Sánchez, nacido en Córdoba en 1959, es un reconocido fotoperiodista que ha cubierto conflictos en América Latina, el Golfo Pérsico, los Balcanes, África y Asia. Su trabajo se centra en el impacto humano de las guerras, con un énfasis especial en las víctimas civiles. Ha recibido múltiples galardones, incluyendo el Premio Nacional de Fotografía en 2009.
Una oportunidad para la reflexión
Visitar Vidas minadas, 25 años en L’ETNO ofrece una oportunidad única para comprender las profundas secuelas que las minas antipersona dejan en las vidas de las personas afectadas. La exposición invita a reflexionar sobre la resiliencia humana y la necesidad urgente de erradicar estas armas para prevenir futuros sufrimientos.